Muchas veces nos olvidamos de hacer cosas importantes. En estos casos podemos decir simplemente:
Se me ha olvidado comprar el pan
– ¿Has recogido el coche del taller?
– No, se me ha olvidado completamente– ¿Has sacado dinero?
– Se me ha pasado por completo = Se me ha olvidado completamente
Si nos acordamos de repente de algo que teníamos haber hecho, decimos
¡Ahí va!
¡Ostras!
Fíjate en este ejemplo:
– ¡Ahi va!
– ¿Qué pasa?
– Ayer era el cumpleaños de mi padre y se me olvidó felicitarle
A menudo hacemos autocrítica:
Se me ha ido la pinza = Me he puesto a pensar en otras cosas y he olvidado algo importante
Estoy yo bueno/a = He sido muy tonto/a, no sé en qué estaba yo pensando
Para criticar el olvido de otros recurrimos a estas expresiones:
Estás empanado
No te enteras de nada
Siempre estás en las nubes
No sé dónde tienes la cabeza