Seguramente sabes qué significa estar triste, alegre, contento, nervioso, preocuparse o tener miedo. Ya es momento de aprender otras emociones.
Sentimos agobio cuando hay demasiadas cosas por hacer y vemos que no podemos hacerlas.
Sentimos ansiedad cuando estamos nerviosos sin una razón determinada. En estos casos a veces comemos, bebemos y fumamos demasiado sin ninguna necesidad de hacerlo.
Sentimos rabia cuando nuestros planes fracasan.
Sentimos vergüenza por algo que hemos hecho mal, o cuando tenemos que hacer algo públicamente y pensamos que no lo haremos bien.
Nos enfadamos con otras personas (o con nosotros mismos) cuando creemos que han hecho algo mal. En América Latina se usa enojarse en vez de enfadarse.
Cuando nos falta algo o alguien importante, lo echamos de menos. Especialmente echamos de menos a las personas queridas. En América Latina se dice extrañar en vez de echar de menos.
Nos deprimimos cuando sentimos tanta tristeza que creemos que la vida no tiene sentido.
Nos ponemos tensos cuando no estamos cómodos ni relajados.
Nos llevamos una sorpresa cuando pasa algo inesperado, y si la sorpresa es negativa, nos llevamos una decepción.
Cuando no pasa nada interesante, nos aburrimos, y cuando pasan muchas cosas interesantes, nos divertimos.
Cuando algo se da en exceso, acabamos hartos, especialmente cuando se acumulan hechos desagradables.
Cuando estamos muy bien, muy cómodos y tranquilos, decimos que estamos a gusto.
Las cosas que provocan una emoción profunda en nosotros nos conmueven.