Es muy complicado resumir los cambios que se han
producido en España durante los últimos 10 años. Hemos formulado esta pregunta a varios españoles de diferentes edades (de
entre 30 y 60 años) y, curiosamente, los más jóvenes piensan que ha habido muchos cambios, mientras que los mayores afirman lo contrario, que las cosas en general han cambiado
muy poco.
Todos los encuestados nombran el creciente uso de las
redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea, como WhatsApp. Se usan tanto que en el
español han aparecido nuevos verbos, tales como “googlear” (hacer una búsqueda en google), “wasapear” (mandar un mensaje por WhatsApp) o "tuitear" (publicar en Twitter).
Internet ha revolucionado la sociedad: a través de la red se puede hacer de todo: comprar, encontrar pareja, reservar entradas, hacer un Máster a distancia y ¡hasta
adoptar un perro!
La comunicación virtual ha mejorado mucho, en cambio, la comunicación real ha empeorado: ahora en
lugar de dedicar tiempo a la familia, se lo dedicamos a nuestros móviles o tabletas.
En el mundo político también han surgido cambios. Mientras antes los partidos
políticos de peso eran dos, el PP y el PSOE, ahora existen nuevas opciones como Podemos
o Ciudadanos. Se ha legalizado el matrimonio gay y ahora a estas parejas
se les permite adoptar hijos.
Ya no se permite fumar en los locales públicos. Y como casi todos los
partidos de fútbol se ven en canales de pago y hay que bajar al bar para verlos, mucha gente ha dejado de fumar.
Todos los encuestados coinciden en que la vida se ha vuelto más complicada.
Ha empeorado la sanidad: hay menos médicos y menos recursos para atender a los
enfermos. La educación universitaria es mucho más cara de lo que era, tanto que mucha gente no puede pagar sus estudios. La crisis económica ha dejado a
millones de personas en el paro. El salario se ha reducido y muchos jóvenes no pueden permitirse alquilar una vivienda y vuelven a vivir con sus padres. El
trabajo es precario, y la gente tiene miedo a tener hijos y no poder mantener a
su propia familia. Muchos inmigrantes han vuelto a sus países porque en España ya no hay trabajo. De hecho, ha aumentado mucho el número de jóvenes españoles
que buscan suerte en el extranjero.