Saber aconsejar es importante, hay que sugerir ideas y soluciones de forma delicada. Los consejos directos valen para amigos y familiares. Con gente desconocida, es mejor usar formas más indirectas.
Los consejos directos se construyen con tener que + infinitivo. Se usan cuando no hay alternativas:
Si quieres salir con Julia, tienes que hablar
con ella (no hay otra manera)
Tener que + infinitivo se usa solo si hay una única opción. Si hay otras opciones, o simplemente para ser un poco más delicados, vamos a utilizar la construcción deberías + infinitivo. También expresa la idea de obligación, pero más suave:
Si quieres salir con Julia, deberías hablar
con ella
Cuando hay varios consejos posibles, usamos la construcción podrías + infinitivo:
Si quieres salir con Julia, podrías invitarla al cine
(hay otras maneras, pero esta es buena)
Si queremos ser aún más delicados, en lugar de dar un consejo directo, proponemos ideas.
Para esto vamos a usar la construcción por qué no + Presente:
Si quieres salir con Julia, ¿por qué no
la invitas al cine?
Otra forma de suavizar el consejo es añadir creo que
o en mi opinión:
Creo que deberías hablar con Julia
En mi opinión, deberías hablar con Julia