Si en la empresa hay puestos de trabajo vacantes, contrata a trabajadores nuevos. Para ello, estudia los currículum de los candidatos, preselecciona a unos pocos y les hace una o varias entrevistas de trabajo. Si el trabajador no sólo cumple los plazos sino que destaca especialmente, le ascienden: le ofrecen un puesto más importante con un sueldo más alto. Cuando un trabajador se pone enfermo, va al médico y le dan de baja. En este caso a veces le sustituye otro trabajador.
Cuando el trabajador que estaba enfermo se recupera, le dan de alta y se reincorpora al trabajo. Si el trabajador trabaja mal o se pone malo muchas veces, le despiden.
Los trabajadores se encargan de distintas tareas. Algunos llevan la parte informática, otros se ocupan de contactar con los clientes...
De vez en cuando asisten a las reuniones que organizan los jefes. También atienden a los clientes. En algunos casos, hacen horas extra.
Los jefes organizan, posponen y cancelan las reuniones, supervisan el trabajo de otras personas y toman decisiones importantes.