A veces no nos queda claro qué quería decir nuestro interlocutor. En este caso le preguntamos:
¿A qué te refieres?
¿Qué quieres decir (con esto)?
A lo que normalmente se responde:
Me refiero a...
Para simplificar o aclarar lo que decimos sirven los reformuladores. Los más usados son:
o sea (coloquial y muy muy muy usado)
en otras palabras (coloquial y formal)
es decir (formal y bastante usado)
dicho de otra manera, esto es (muy formales)
Ejemplos:
La reducción de los ingresos de la población puede llevar a la disminución de su bienestar, es decir (= ahora os lo explico de manera más fácil), cuanto menos gana la gente, peor vive
La principal causa de la delincuencia es la exclusión social, en otras palabras, la marginación de la población lleva a la delincuencia
– ¿Me puedes llevar al médico hoy?
– El coche está en el taller, o sea (=esto significa), que noEn el examen he cometido un par de errores tontos, además, no me ha dado tiempo a contestar a las últimas tres preguntas, o sea que (= hablando claramente), he suspendido
También puede ser nuestro interlocutor el que reformula por nosotros:
– No me ha salido muy bien el examen.
– O sea (=en otras palabras), que has suspendido.